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Sin embargo, este tipo de energía, que en un principio era considerada como una de las grandes esperanzas para el futuro de la humanidad, cada vez causa más rechazo. No existe proyecto de parque eólico que no tenga miles de alegaciones de grupos ecologistas y colectivos ciudadanos en su contra. Como ocurre con las prisiones o los vertederos, todo el mundo piensa que son necesarios pero nadie quiere tenerlos a la puerta de su casa. Al final, uno piensa que las energías renovables son buenas mientras están basadas en estudios futuristas, pero dejan de serlo cuando pasan de ser proyectos a realidades rentables; en ese momento, “los de siempre” se oponen pensando que sólo sirven para enriquecer a los “capitalistas” esquilmándoles a ellos su patrimonio paisajístico.
Muchas veces he escuchado la siguiente pregunta: ¿y por qué no los instalan en el mar, lejos de las costas donde no molesten a nadie?
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Pues simplemente porque no se puede. No existe (o más bien, no existía) un Estudio Estratégico Ambiental del Litoral, que acotara y definiera las zonas aptas y las no aptas para la instalación de parques eólicos marinos. Es decir, un documento (o Mapa Eólico Marino) que determine las zonas del dominio público marítimo-terrestre que, únicamente a criterios ambientales, reúnen condiciones favorables para la ubicación de instalaciones eólicas marinas.
Después de muchos años de espera, por fin el gobierno lo aprobó a finales del pasado mes de abril. El citado documento delimita las zonas de exclusión de las zonas aptas y, dentro de estas últimas, establece una gradación para la implantación de parques eólicos marinos en función de los condicionantes ambientales.
A partir de ahora, los promotores de parques marinos podrán realizar solicitudes de reserva en las zonas declaradas aptas, presentar sus proyectos y, mucho me temo, recorrer el largo y tortuoso camino administrativo y técnico habitual para lograr las concesiones por parte del Ministerio de Medio Ambiente.
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2 comentarios:
Más o menos el peso de las eólicas es del 15% mensual, con la pega de su irregularidad. Cosas de depender del tiempo atmosférico.
A mi las organizaciones ecologistas me dan igual, pero desde luego no me gusta el malgasto y enriquecimiento de algunos con el dinero de todos, hablo de las energias subvencionadas, digo, renovables. Me refiero concretamente a las eólicas.
Escribí algo hace tiempo, más bien leí.
http://damagum.blogs.uv.es/2009/03/18/kioto-o-com-llancar-els-diners/
Hola.
Gracias por leer este blog.
El tuyo continúa pareciéndome estupendo. Lo visito siempre que puedo.
Yo creo que las energías renovables sí se deben subvencionar. Ahora bien, estoy de acuerdo contigo en que esa subvención no debe servir para enriquecer a unos cuantos, sino que se debe utilizar en investigación y desarrollo del producto para que algún día llegue a ser rentable. Sin rentabilidad no tendrán futuro.
Y no se deben olvidar de las nucleares... ¡Ostras! ya he tocado el tema tabú.
Saludos.
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