sábado, 28 de marzo de 2015

Los 20 libros más queridos (y comprados) por los lectores



Desgraciadamente, empieza a ser habitual visitar casas en las que encontrar un libro en una estantería resulta una misión imposible. Tampoco es que los españoles hayamos destacado nunca en la lectura de libros: un tercio reconoce no leer nunca libros y del resto, la mitad dice leer, como mucho, dos o tres al año. Pero es que ahora ni siquiera lo disimulamos llenando nuestros comedores con enciclopedias, atlas y diccionarios. Con poseer una pantalla plana con más de 50 pulgadas nos sentimos satisfechos. Y es una lástima.

Les traemos un listado con los 20 libros más vendidos de la historia: auténticas obras de arte (aunque justo es reconocer que algunos se han colado entre los mejores gracias a una excelente labor de márketing). ¿Cuántos han leído?

Encabeza el ránking “Historia de dos ciudades” novela publicada por Charles Dickens en 1859. Se han vendido más de 200 millones de ejemplares.


En segunda posición encontramos “El señor de los anillos”, la obra épica de J.R.R. Tolkien que lleva vendidos más de 150 millones en todo elmundo.


“El Principito”, la principal obra del escritor francés Antoine de Saint Exupery, lleva vendidos más de 100 millones de libros. La publicó en abril de 1943.


Repite J.R.R. Tolkien en cuarta posición con “El Hobbit”, novela fantástica de la que ya se han vendido más de 100 millones de ejemplares.


Una de las obras maestras de la literatura china aparece en quinta posición: “Sueño en el pabellón rojo” de Cao Xuegi, escrita a mediados del siglo XVIII durante el reinado de la dinastía Qing. También sobrepasa los 100 millones.


Seguimos en China con el libro “Triple representatividad”. Esta obra recoge la teoría política desarrollada por el Secretario General del Partido Comunista y Presidente de la República Popular China Jiang Zemin. Supera los cien millones de ejemplares.


Agatha Christie también entra en el selecto club de los “más de 100 millones” con su novela más vendida: “Diez negritos”


“El león, la bruja y el armario”, novela publicada por C.S. Lewis en 1950 lleva unos 85 millones de ventas. Es el libro más conocido de “Las crónicas de Narnia”.


La segunda novela de H. Rider Haggard, “Ella”, ha logrado vender 83 millones de libros.


“El código Da Vinci” del escritor Dan Brown ha logrado vender más de 80 millones de ejemplares en 44 idiomas.


La obra maestra de J.D. Salinger, “El guardián entre el centeno” ha vendido 65 millones de ejemplares.


El primer libro escrito en lengua no inglesa es “El alquimista” de Paulo Coelho. Unos 65 millones de ejemplares se han vendido en 150 países traducidos a 63 lenguas.


 “El camino a Cristo” de Ellen G White ha vendido 60 millones de copias.


La historia de “Heidi”, de Johanna Spyri, ha vendido ya 50 millones de ejemplares.


“Tu hijo” de Benjamin Spock también ha logrado vender la friolera de 50 millones de libros.


Publicado por primera vez en 1908, “Ana de las Tejas Verdes” de la canadiense Lucy Maud Montgomery sobrepasa los 50 millones de ventas.


“Belleza negra”, novela escrita en 1877 por la inglesa Anna Sewell suma 50 millones de ejemplares vendidos.


También sobrepasa los 50 millones de ejemplares “El nombre de la rosa” de Umberto Eco.


“El informe Hite”, de Shere Hite ha vendido 48 millones de copias.


Y cerramos esta lista con “El conejo travieso”, de Beatrix Potter, que ha logrado vender más de 45 millones de ejemplares.


Como habrán podido comprobar no tenemos ningún libro escrito por un autor español entre los veinte primeros. Y no será porque no hayamos tenido genios de la literatura precisamente.  


miércoles, 18 de marzo de 2015

Hielo de metano, la próxima revolución energética mundial



Hace apenas una década se empezaba a hablar de un “nuevo tipo de petróleo”, los hidrocarburos no convencionales, shale oil y shale gas (aunque, realmente, son petróleo y gas normales, lo que no es convencional es la forma de extraerlo con el polémico “fracking”). Pocos creían en esta nueva fuente de energía. A día de hoy, este tipo de hidrocarburo ha logrado cambiar el panorama energético mundial y es una de las causas (aunque no la única) de que el barril de petróleo haya bajado en el último semestre más de un 50%.

Sin embargo, el mundo cambia muy rápido y ya se empieza a hablar de una nueva revolución energética. Y esa revolución vendrá del ¡hielo! Como lo leen, a simple vista parece hielo normal pero si se le acerca una llama, empieza a arder… porque está lleno de gas metano.

Existen muchas formas de denominarlo: hidratos de metano, hielo de metano, hielo ardiente…  en realidad se trata de moléculas de gas metano que han quedado atrapadas en otras moléculas mayores de agua congelada. Unas estructuras en forma de jaula formadas por la combinación de bajas temperaturas y alta presión que se encuentran en grandes cantidades en los lechos marinos, a partir de los 500 metros de profundidad y en el suelo de las regiones polares, a partir de 150 metros.


Según las estimaciones de diferentes servicios geológicos y energéticos internacionales, las reservas de hidratos de metano repartidas por todo el mundo pueden superar a las de petróleo, gas natural y carbón juntas. Es más, los datos del Servicio de Geología de Estados Unidos apuntan a que la acumulación de este “hielo ardiente” puede ser hasta 100 veces mayor que las reservas de shale gas estimadas en EEUU.  Y por si faltara poco, su intensidad energética es muy superior a la del gas metano convencional: un metro cúbico de hidrato de metano equivale a 164 metros cúbicos de gas metano.

La existencia de los hidratos de metano ya era conocida por los científicos en el siglo XIX, pero sólo como una construcción teórica que se consiguió replicar en laboratorio. Fue en la década de los 60 del siglo pasado cuando la extinta Unión Soviética se lanzó a la búsqueda de este hidrocarburo en Siberia y en 1971 descubrió en el lecho del Mar Negro la existencia real de los hidratos. En la actualidad, Estados Unidos, Corea, Canadá, China e India tienen programas activos de investigación en este campo, pero es Japón quien parece que lleva la delantera. En 2013 fue el primer país en conseguir extraer hidratos de metano de manera continuada en la fosa de Nankai y a principios de 2015 han repetido el éxito en la costa norte del país.


Sin embargo, la extracción de este “maná” del fondo del mar todavía tiene que superar un par de problemas importantes: las dificultades técnicas y los problemas medioambientales que pudieran ocasionar.

Los científicos vienen utilizando diferentes técnicas para la extracción y aprovechamiento del metano. En un principio se utilizó la estimulación térmica: inyectar un fluido caliente o vapor para descongelar el agua y liberar el metano. El método fue rechazado pronto ya que se desaprovechaba mucho calor y solo se podía utilizar si existían capas muy porosas que permitieran penetrar a los líquidos calientes.     

Actualmente se están empleando otros métodos como la inyección de productos químicos para desestabilizar el hidrato de metano, la inyección de CO2 a alta presión que lograría liberar el metano dejando el hidrato intacto y, el que parece más factible y económico, la despresurización, consistente en cambiar la presión para disociar las moléculas de agua y las de metano. Ya conocen la famosa cita: “Si a un ingeniero le das tiempo y dinero suficientes, encontrará una solución. Nunca apuestes contra in ingenio humano”


En cuanto a los problemas ecológicos, como suele ser habitual, existen discrepancias entre quienes defienden el progreso que pudiera conllevar esta energía y quienes creen que podría acabar con el mundo tal como lo conocemos. Intentando encontrar la objetividad, decir que el uso de metano como combustible es menos contaminante que la quema de petróleo o carbón, pero el metano es entre 15 y 20 veces más nocivo como gas de efecto invernadero que el CO2. Además, existe el peligro de que durante la extracción se puedan producir corrimientos del suelo submarino facilitando la liberación del metano a la atmósfera. Los más catastrofistas (que siempre los hay) afirman que el calentamiento global podría elevar la temperatura de los océanos, descongelar el suelo ártico, descomponer los hidratos y liberar el metano a la atmósfera, lo que a su vez agravaría el cambio climático, como en un bucle infinito.  

El tiempo dará o quitará la razón a los unos o a los otros. ¿Cuánto tiempo? No mucho; se calcula que se podría tener la tecnología necesaria para la extracción en 2018 y que se iniciaría la comercialización del metano entre 2023 y 2027. Estaremos atentos a las novedades.


martes, 10 de marzo de 2015

Ryanair elige el Aeropuerto de Castellón; ¿continuarán llamándolo peatonal?



La compañía aérea irlandesa Ryanair, la mayor “low cost” mundial, anunciará mañana en el Palacio de las Aulas, perteneciente a la Diputación de Castellón, el acuerdo al que ha llegado con la firma canadiense SNC Lavalin para operar de forma habitual en la base aérea de Vilanova d´Alcolea. Para que nos entendamos: para volar desde el "archifamoso" Aeropuerto de Castellón.

Posiblemente, en la presentación a la que acudirán altos ejecutivos de Ryanair, se definan las nuevas rutas en las que esté implicado el aeropuerto castellonense así como las fechas previstas para empezar a operar. Fechas que no serán inmediatas ya que la presentación lo que dará será el pistoletazo de salida a la publicación en su web de las ofertas de vuelos  que, lógicamente, tienen que ser contratadas por los usuarios. Casi con toda seguridad, los primeros vuelos regulares se realizarán antes del verano aunque aún está por confirmar.

¿Por qué elige una gran compañía como Ryanair este aeropuerto? Por tres motivos fundamentales: porque la zona turística castellonense está virgen para este tipo de vuelos, porque las tasas del aeropuerto (recordemos que no lo gestiona AENA) son muy competitivas y porque la moderna operativa de las instalaciones permite que desde que aterriza un avión y bajan los pasajeros hasta que suben los nuevos ocupantes y despega el aparato apenas transcurran 25 minutos. Y en estas compañías de bajo coste, la rentabilidad aumenta cuanto menos tiempo está el avión parado.


Todos conocemos la historia del Aeropuerto de Castellón. Inaugurado hace ahora cuatro años, pronto se convirtió en el primer aeropuerto para peatones del mundo. Las prisas electoralistas de los mandatarios del PP provocaron que se inaugurara sin haber finalizado correctamente las obras y, en consecuencia, sin tener las homologaciones oportunas por parte de los organismos internacionales de aviación. Más tarde, a esos problemas se sumaron otros relacionados con la quiebra de la concesionaria original y con enrevesados juicios y trabas burocráticas. Finalmente, hace escasos tres meses se consiguieron todas las autorizaciones y abrieron el aeropuerto  con el irónico primer aterrizaje oficial: un helicóptero pilotado por jubilados. ¡Lo que le faltaba a las instalaciones!

Desde el primer momento arreciaron las críticas por parte de la oposición política, de la prensa y de la sociedad en general. Y con razón. Todavía se quedaron cortos. La desfachatez de inaugurar, a bombo y platillo, un aeropuerto no operativo a dos meses de las elecciones locales y autonómicas por el mero hecho de salir en la foto no tiene perdón. Y no tenemos ganas de ensañarnos con la ridícula estatua del hoy convicto Fabra. Se lo dejaron en bandeja a la oposición: “aeropuerto peatonal”, un eslogan que caló muy hondo entre la población y que dentro de unos meses, en las próximas elecciones, les costarán un buen puñado de votos. Miles seguramente.


Pero las críticas llegaron hasta el extremo de afirmar que ese aeropuerto era una ruina y que se había tirado el dinero público. Y eso era, y es, mentira. Una mezquina y partidista mentira.

Quienes hayan tenido la suerte de visitar la provincia de Castellón conocerán las maravillosas playas de su litoral. Desde Moncofar hasta Vinaroz, pasando por Benicasim, Oropesa, Alcoceber, Benicarló y la monumental Peñíscola (y nos dejamos muchas) estos centros turísticos no tienen nada que envidiar a los de la provincia de Alicante, Valencia o la limítrofe Tarragona. Y si sus playas son magníficas, el interior de la provincia no le va a la zaga, con el Maestrazgo y la ciudad de Morella como puntos más conocidos.

Sin embargo, a pesar de ser una provincia privilegiada, es la que menos turistas recibe de todo el arco mediterráneo, a años luz de Alicante, Gerona, Barcelona o Tarragona. ¿Tendrá algo que ver que Castellón es la única provincia que no tenía aeropuerto? Los críticos con la instalación alegaban que había dos aeropuertos muy cerca y que construir otro era tirar el dinero. Falso. El de Valencia está entre 100 y 180 kilómetros (según a la población a la que se quiera llegar) y el de Reus, en la provincia de Tarragona, a la misma distancia pero en sentido contrario. Cuando usted coge un avión para ir de vacaciones a una tranquila playa, ¿le apetece tirarse dos horas en un autobús para llegar a su paradisiaco hotel y dos más para volver al aeropuerto o llegar en apenas quince o veinte minutos?


Independientemente de su tremendo potencial industrial que, sin duda, se verá favorecido con esta nueva infraestructura, la provincia de Castellón (y la vecina de Teruel, a tiro de piedra del nuevo aeropuerto) tiene un futuro turístico envidiable. Seguramente por eso han tenido tantos problemas con el aeropuerto. En el mundo de la política y la economía prima el egoísmo y la hipocresía. Y a nadie le gusta que su vecino crezca y le quite un trozo del pastel. ¿Verdad?     


Ryanair será la primera en llegar, pero, al parecer, existen otras (de bajo coste y chárter) con las negociaciones bastante avanzadas que pronto podrían aterrizar en Castellón. ¿Conseguirán llenar el aeropuerto “peatonal”? Quién sabe. Todo es posible.  


viernes, 6 de marzo de 2015

Los 10 aviones de papel más impresionantes de la historia



¿Quién no ha hecho un avioncito de papel? Todos hemos hecho nuestros pinitos en el arte de la ingeniería aeronáutica ya sea de pequeño, en una aburrida clase de matemáticas o en un soporífero día de oficina. Que volasen y llegasen lejos ya era otra cuestión. 
Pero hay gente que se toma muy en serio este tema. Les traemos la lista de los 10 aviones de papel más impresionantes de la historia elaborada por la revista Wired en la que han tenido en cuenta su tamaño, su eficacia o la precisión con que imitan aeroplanos reales.

Encabezamos el post con la fotografía con el avión que ganó el concurso del museo aeroespacial de Tucson, en Arizona. Fue un chaval de 12 años, Arturo Valdenegro, quien construyó el avión que voló a más distancia y que sirvió de modelo a su “hermano mayor”, un "avionazo" de 14 metros de largo y 360 kilos que voló desde una altura de 900 metros a una velocidad máxima de 157 km/h antes de estrellarse.  


En 1967, la revista Scientific American organizó el primer concurso internacional de aviones de papel en el que participaron ¡12.000 personas! Los 20 mejores diseños, como este de Lewis G. Lowe, se reunieron en un libro con instrucciones para crearlos que finalmente no vio la luz.


La idea del concurso fue recogida 40 años después, en 2008, por la artista checa Klara Hobza. No sabemos quién ganó el concurso, pero a la historia pasó este modelo de Jack Vegas por su originalidad. Por supuesto, volaba. 


La compañía austriaca Red Bull organiza anualmente una competición de aviones de papel que reúne a cerca de un millar de personas de más de 80 países participando en tres pruebas: mayor distancia, cuyo ganador sobrepasa fácilmente los 50 metros, tiempo de vuelo más largo, con más de 10 segundos y acrobacias. Si creen que tienen oportunidad de ganar con sus diseños… ya saben dónde acudir.


En la tercera categoría, acrobacias, los aviones pueden construirse con tijeras y pegamento. En la mejor edición realizada hasta la fecha, la de 2012, compartieron el primer cajón con 5 dieces el norteamericano Ryan Naccarato y el polaco Tomascz Chodyra cuyo aparato realizó una “sencilla” acrobacia: dar la vuelta a una columna y regresar mansamente a sus manos. ¡Casi nada!


La imagen representa el lanzamiento que tiene el récord mundial de distancia. Para la ocasión, el diseñador del avioncito, John Collins, se hizo con los servicios del ex-quaterback Joe Ayoob, para lanzarlo. Bastante sencillo y montado sólo con papel y un poco de celo, llegó a 69,14 metros de distancia (superando en 6 metros la anterior marca) planeando y recuperando incluso un poco de altura durante su vuelo. Hasta ese momento, los avioncitos que ostentaban el récord eran como dardos que se limitaban a subir y bajar.    


Ken Blackburn ha batido en cuatro ocasiones el récord del mundo de mayor duración de vuelo. Él modelo de la foto, tardó 27,6 segundos en 1998 en tocar suelo. Mantuvo su récord durante 11 años.


En 1992, este avión llamado “The White Pelican” batió el récord Guiness al avión de papel más grande, con un ala de 9 metros. Para certificarlo, debía volar al menos 15 metros y llegó hasta los 35.


Éste avión de Fiddlers Green que reproduce al avión que más aparatos enemigos abatió en la Segunda Guerra Mundial, el Messerschmitt-Me 109, es un recortable que, por desgracia, no vuela. Pero, sin duda, es el avión de papel más bonito que he visto en mi vida.


Seguramente el avión más curioso de esta lista. El Avrocar asemeja un platillo volante real que se construyó en Canadá allá por los años 50 y que no terminó de desarrollarse por falta de fondos en 1961.


Los aviones de papel en Japón pertenecen a otra categoría. En la foto pueden observar las dobleces que se tienen que realizar a una cuartilla de papel para conseguir este espectacular avión. No puede volar, pero este “origami” hecho sólo doblando papel (si se cortara ya no sería “origami” sino “kirigami”) tiene un mérito indudable.


También se pueden comprar para montarlos tranquilamente en su casa. Y por unos 10 euros. En unas 4 horas pueden montar este Eurofighter. Y vuela.


Éste F-14 también está a la venta. En esta ocasión, el montaje es más complicado y se tarda unas 10 horas. Además de volar, las alas cambian de posición como en el modelo original.  


Y terminamos con la campaña que realizó Samsung para probar la resistencia de sus tarjetas de memoria SD. Lanzaron al espacio un globo aerostático con 100 aviones de papel que incorporaban una memoria en su interior. Dada la distancia desde la que lanzaron, se recuperaron muy pocos, pero todas las tarjetas que portaban funcionaban perfectamente sin perder sus datos.