lunes, 14 de junio de 2010

¿Qué son y por qué se prohíben el burka y el niqab en Cataluña?



Primero fue Lérida, hoy mismo ha sido Barcelona y parece que muy pronto se le sumarán Gerona, Tarragona y otras ciudades catalanas. Las grandes ciudades de Cataluña están prohibiendo el uso del burka y del niqab en centros cívicos, mercados municipales, guarderías, bibliotecas y ayuntamientos. No así en las calles o en otras instalaciones que no sean públicas. Es de suponer que no tardará en extenderse al resto de España.

El motivo no es otro que la seguridad: el decreto busca impedir que nadie entre en estas instalaciones sin que se le pueda identificar claramente, lo que también afectará a quienes pretendan acceder con pasamontañas y casco de moto.


¿Significa esto que ya no veremos a las mujeres musulmanas cubriendo parte de su cabeza en los organismos oficiales? No exactamente. Las musulmanas utilizan múltiples prendas para cubrir sus cabellos y no todas van a estar prohibidas. Entre las más conocidas están los citados burka y niqab, pero también existen el hiyab y el chador. Vamos a diferenciarlos:

- Burka: es una túnica que cubre totalmente a la mujer, de la cabeza a los pies, y que sólo deja ver a través de una rejilla a la altura de los ojos. Se utiliza principalmente en Afganistán. Su uso en los países árabes y Europa es muy minoritario.

- Niqab: es un conjunto de color negro que se compone de un amplio tocado para el cabello y el cuello, un velo que recorre la cara de oreja a oreja y tapa la nariz y la boca dejando al descubierto la fina franja de los ojos, y una 'abaya' o túnica amplia hasta los pies. Muchas mujeres lo complementan con guantes para ocultar sus manos. Su uso proviene de las sociedades del Golfo, en especial de Arabia Saudí.


- Chador: es una prenda que utilizan generalmente las mujeres chiíes, mayoritarias en países como Irán o Irak. Suele ser de color negro y se compone de una larga 'abaya' que esconde la forma del cuerpo femenino y un velo que cubre cabellos y cuello. Deja al descubierto la cara y las manos.

- Hiyab: Es un pañuelo que las mujeres musulmanas utilizan para cubrir sus cabellos y, a veces, su cuello. Esta toca deja totalmente al descubierto el óvalo de la cara y no impide la comunicación. Su tamaño, color y colocación depende de las costumbres de cada comunidad, así como de la intención de quien lo luce.


Los orígenes del hiyab (que significa cortina) se remontan a la época de los califas rachidíes, cuando se impuso el uso de unos cortinajes que separaban el lugar en que se situaba el califa del espacio ocupado por el pueblo.
El Corán ordena la modestia, la decencia y el pudor a la hora de mostrar públicamente el cuerpo y señala a las mujeres que se cubran con el manto (‘yilbab’) para que puedan ser reconocidas. En su época resultó ser un símbolo de estatus, un rasgo distintivo de las mujeres libres que se diferenciaban así de las esclavas, a las que no les estaba permitido llevar el 'yilbab'.


Para muchas mujeres que viven actualmente en países occidentales, el uso de la prenda es una forma de permanecer fieles a sus orígenes, lejos de su tierra, y distinguirse como miembros de su comunidad. Al llevarla preservan su pureza e integridad.
Por lo tanto, es incierta la creencia extendida de que las musulmanas están obligadas, ya sea por la religión o por sus familiares, a llevar este tipo de prendas. Incluso se ha convertido en una especie de moda al combinarlas con prendas occidentales (pantalones vaqueros) sin contravenir la tradición de sus progenitores.

¿Se debería prohibir su uso en cualquier lugar alegando motivos de seguridad? La discusión está en la calle. ¿Qué opinan ustedes?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

El chador y el hiyab no creo que se deban prohibir en la calle etc. ya que no impiden ver la cara de la persona y no impiden su identificación. Sin embargo, aún así se deben atener a otras normas que haya en escuelas, etc. sobre no llevar la cabeza cubierta. Si mis hijos no pueden llevar la cabeza cubierta con un gorro o visera en clase, tampoco las musulmanas pueden llevar el hiyab. O todos o ninguno.

Anónimo dijo...

¡Ay, qué pena que todavía tanta gente piense que es igual llevar una gorra que querer cumplir bien con tu religión! ¡Menuda comparación! ¿Cómo puede molestarle a alguien que nos tapemos el pelo o no?

C.Nina dijo...

Anónimo 1: Es una pena que compares una gorra con algo que se hace por motivos religiosos.

Anónimo dijo...

Seamos prácticos. Llevar en la cabeza un pañuelo en clases de educación física es absurdo e incómodo. Insistir en ello en un trabajo en el que se requiere llevar un uniforme concreto es absurdo.
Limitar el ser y sentirse de una religión a llevar puesto algo físico lo único que demuestra es una gran pobreza de fe en la religión que se profesa y muchas ganas de poner barreras.