Los precios de los pisos ya no bajarán más

“Es una gran oportunidad. Los precios de los pisos han tocado suelo y ya no bajarán más”. “Aproveche la ocasión porque, a partir de ahora, los pisos empezarán a aumentar de precio”.

Si usted está pensando en comprarse un piso y ha visitado inmobiliarias, promotoras e, incluso, particulares, seguro que ha tenido que escuchar este tipo de frases. Están desesperados porque hace ya cerca de dos años que no venden prácticamente nada y llevan también esos dos mismos años advirtiendo que es un buen momento para comprar ante los “chollos” que ofrece el mercado.
Pero, ¿qué hay de cierto en estas afirmaciones?

Teniendo en cuenta que todavía estamos envueltos en una tremenda crisis, que el paro no cesa de aumentar y que existe una enorme sobreoferta en el mercado inmobiliario (vivienda nueva, usada y la embargada por los bancos), los pisos, por regla general (al menos en España), continuarán bajando de precio durante los próximos dos o tres años, como mínimo.
Aunque también es cierto que en algunas zonas, debido a que el descenso ha sido mayor o a que existe una incipiente demanda, el precio de la vivienda tenderá a estabilizarse y, en algunos contados casos, a aumentar ligeramente.

¿Cómo distinguir en qué zonas seguirán descendiendo los precios y en cuales no? Les damos cuatro sencillos consejos para que, después de darse una vuelta por la zona en donde desean comprarse el piso de sus sueños, puedan “adivinar” si, verdaderamente, los precios ya no van a bajar más:

- Embargos en la zona elegida: La forma más rápida de que el precio de una vivienda baje con fuerza es que el vecindario o el bloque sufra embargos de viviendas, lo que crea un efecto dominó en las valoraciones de los pisos cuando los bancos las sacan al mercado.Según algunos estudios norteamericanos, por cada vivienda embargada en el vecindario el precio de las casas cercanas baja un 1%, y el porcentaje crece de forma exponencial a medida que hay más casas en esa situación. En la portal de Internet Idealista se puede saber qué pisos procedentes de bancos hay en esa zona.

- Viviendas permanentemente en venta: Si observa que, al cabo de varios meses, los cartelitos de “se vende” continúan todos en el mismo sitio, malo. Eso significa que compradores y vendedores no se ponen de acuerdo en los precios. En esta situación es probable que las casas no se vendan a no ser que los propietarios bajen en sus pretensiones. Por ejemplo, si un piso está a la venta por un precio de 200.000 euros durante meses implica que el valor de mercado del inmueble es inferior. Además, si actualmente las viviendas están más tiempo en venta que hace un año es un síntoma de que los precios seguirán bajando y viceversa.

- Aumento del paro en la zona: Que el número de parados en el barrio aumente es síntoma de que los precios seguirán bajando, bien sea porque los propietarios de los pisos no puedan pagar sus hipotecas y les embarguen la vivienda o porque necesiten venderlas para obtener liquidez.

- Deterioro del vecindario: Si observa que las viviendas cercanas a ese piso al que le ha puesto el ojo muestran signos de deterioro (pintura, ventanas, buzones, etc.) significa que sus propietarios no las pueden mantener. Por lo tanto, la puesta en venta de las mismas estará cercana y provocará una bajada generalizada de precios en toda la zona.

Todas estas indicaciones no se refieren sólo a pisos de segunda mano; si la vivienda es de nueva construcción y se encuentra rodeada de edificios con las características que les hemos reseñado, también verán afectados sus precios a la baja.

Ya se que, después de leer todo esto, les parecerá que esperar un tiempo y aprovecharse de las dificultades económicas de las demás puede resultar “abusivo”. No se equivoquen, no estamos hablando de especular con los precios de los pisos, sino de ahorrarnos un dinero en la casa que vamos a habitar durante mucho tiempo. El disponer de ese dinero extra puede suponer no pasar apuros en el futuro a la hora de pagar la hipoteca.

Y es que el dinero, desgraciadamente, es una cosa muy seria.