La noticia la leo en un blog de elmundo.es y no me resisto a comentarla debido a la nausea que me ha provocado: en un llamado “parque natural” de tigres Xiongsen de Gullin, en China se hacinan en jaulas 1.400 tigres esperando una muerte segura.
¿Por qué esa certeza de que van a morir? Pues muy fácil, debido a la falta de alimentación, ya han perdido parte de su pelaje y en algunos casos la mitad de su peso normal. Y lo peor es que su propietario dice que se le están acabando los fondos y que muchos no sobrevivirán al invierno.
En China, el cadáver de un tigre puede llegar a valer 20.000 euros. Con su cuerpo se fabrican desde vino a pastillas que supuestamente potencian el vigor sexual (todavía no se han dado cuenta de que de donde no hay no se puede sacar).
Pero los propietarios de estos animales no los pueden matar debido a que desde hace 14 años una ley china impide traficar con partes del cuerpo del tigre. Numerosos empresarios de “granjas de tigres” están presionando al gobierno para que autorice este comercio, al menos en el caso de que el animal haya muerto por causas naturales. Y ¿qué muerte hay más natural que la inanición?
De todas formas, el comercio ilegal de tigres muertos ya existe. La mayoría de los operadores de parques naturales (¡qué ironía!) de China se saltan la prohibición y venden de forma clandestina los cuerpos troceados de los animales. Simplemente hay que sobornar al funcionario de turno y eso en China no resulta muy difícil.
Por cierto, este parque, el Xiongsen, ya se hizo famoso hace unos meses cuando daban de comer a los tigres reses vivas dentro de un recinto al que acudía numeroso público, entre ellos niños, para ver cómo eran cazadas por los tigres hambrientos. Como parece que no daba suficiente, ahora se dedican a matar a los tigres.
¿Por qué esa certeza de que van a morir? Pues muy fácil, debido a la falta de alimentación, ya han perdido parte de su pelaje y en algunos casos la mitad de su peso normal. Y lo peor es que su propietario dice que se le están acabando los fondos y que muchos no sobrevivirán al invierno.
En China, el cadáver de un tigre puede llegar a valer 20.000 euros. Con su cuerpo se fabrican desde vino a pastillas que supuestamente potencian el vigor sexual (todavía no se han dado cuenta de que de donde no hay no se puede sacar).
Pero los propietarios de estos animales no los pueden matar debido a que desde hace 14 años una ley china impide traficar con partes del cuerpo del tigre. Numerosos empresarios de “granjas de tigres” están presionando al gobierno para que autorice este comercio, al menos en el caso de que el animal haya muerto por causas naturales. Y ¿qué muerte hay más natural que la inanición?
De todas formas, el comercio ilegal de tigres muertos ya existe. La mayoría de los operadores de parques naturales (¡qué ironía!) de China se saltan la prohibición y venden de forma clandestina los cuerpos troceados de los animales. Simplemente hay que sobornar al funcionario de turno y eso en China no resulta muy difícil.
Por cierto, este parque, el Xiongsen, ya se hizo famoso hace unos meses cuando daban de comer a los tigres reses vivas dentro de un recinto al que acudía numeroso público, entre ellos niños, para ver cómo eran cazadas por los tigres hambrientos. Como parece que no daba suficiente, ahora se dedican a matar a los tigres.
Solemos bautizar a los tigres como bestias. Sin duda lo son, pero en mucha menor medida que los propietarios de estos parques. ¿Cómo pueden dejar agonizando en jaulas a 1.400 animales por el simple hecho de hacer negocio con su muerte?
¿Y la gente que compra esos productos vigorosos sacados de los cadáveres de lo tigres? ¿Qué pensar de ellos? Millones de consumidores asiáticos esperan las famosas medicinas. Ojalá, después de consumirlo, no se la encuentren nunca más en su vida.
¿Y las autoridades chinas? Pues como siempre, a lo suyo. Dejándose sobornar, mirando hacia otro lado y manteniendo la férrea dictadura sobre su población.
Si quieren más información acudan a esta página web http://www.savethetigerfund.org/ . No es agradable, pero la vida, mientras existan todos estos indeseables, es así.
No se caerá el propietario del parque dentro de una jaula.
- ¿A ti de pequeñito no te llevaban al circo?
- No. Solamente fui a uno en el que había payasos y malabaristas.
- ¿Por qué, Paco?
- Porque mis abuelos, que son los que nos llevan normalmente al circo, no querían que viese animales sufriendo en el escenario, haciendo cosas que no eran naturales para ellos.
- Pues tenían razón.
- ¿A ti de pequeñito no te llevaban al circo?
- No. Solamente fui a uno en el que había payasos y malabaristas.
- ¿Por qué, Paco?
- Porque mis abuelos, que son los que nos llevan normalmente al circo, no querían que viese animales sufriendo en el escenario, haciendo cosas que no eran naturales para ellos.
- Pues tenían razón.
3 comentarios:
No es posible que en occidente ponderamos tanto a las filosofías orientales de supuesto "respeto a la naturaleza" "espiritualidad" valores como el "honor", "disciplina", "respeto a los viejos", "alimentaciòn", etc., y pretendamos ignorar estas aberrantes creencias ancestrales
Que tal y a lo mejor si es cierto que ingerir tigre aumenta la potencia sexual y por eso hay tantos chinos.
por eso para ayudar a los tigres a incrementar su reproducciòn les damos a ingerir jarabe de chino?
ES UNA COMPLETA MATANZA SIN NISIQUIERA UN POR QUE..... NO SE PUEDE HACER ESO CON UNOS POBRES ANIMALES EL QUE AGA ESO ES UN COMPLETO DESASTRE COMO SER HUMANO ME DA MUCHA VERGUENZA QUE LAS PERSONAS SEANS ASI NO TIENEN DERECHO A HACER SUFRIR A ESOS POBRES ANIMALES....
Publicar un comentario