martes, 25 de noviembre de 2008

Barceló, Gallardón, Carod... más “ayudas” para capear la crisis

Los que siguen este blog ya conocen nuestra máxima en relación con nuestros gobernantes y su política económica: el buen gestor no es el que más recauda (vía impuestos) sino el que mejor gasta los recursos de que dispone.

Viene esto a cuento porque constatamos que, día tras día, continúan sucediéndose los “actos vandálicos” contra los presupuestos de los organismos públicos (o sea, nuestro dinero) perpetrados por nuestros gobernantes. Y si estos “actos” siempre son graves, ahora con la acuciante crisis económica que nos invade, todavía lo son más.


Ya conocen las cifras: 30.000 personas en España viven en la calle, un millón y medio de familias viven en infraviviendas, un 12% de la población que quiere trabajar no encuentra empleo, uno de cada cinco españoles vive en la pobreza, los aumentos de embargos de viviendas aumentan de forma vertiginosa, las organizaciones de caridad ven como se multiplican las peticiones de ayuda para poder comer o vestir...
Nuestros políticos, muy sensibles ante las dificultades de la población que les paga sus generosos sueldos, reaccionan ante la adversidad. ¿Quieren saber cómo?

-Alberto Ruiz Gallardón, alcalde de Madrid, se gasta 74 millones de euros en papeleras. Si, como lo oyen, a 1.200 euros la papelera. Pero no es que en Madrid no haya ninguna papelera. Es que el modélico alcalde va a sustituir 53.000 papeleras que ya existen por otras con un nuevo diseño, mucho más moderno, con cenicero y expendedores de bolsas para los excrementos de los perros. Y las lavarán cada quince días. La información no aclara si también disponen de hilo musical.


-La Generalidad de Cataluña merecería un blog aparte. Sus gastos son, como poco, curiosos: Vamos con los trabajos externos, con los “famosos” informes: 1.400 euros en un estudio para conocer cómo funciona un ambientador para grandes superficies, 12.000 para otro sobre juguetes no sexistas (que, por cierto, fue sacado de páginas de Internet), “estudio sobre plantas aromáticas, trufa negra y pasto de los Pirineos” 156.000, “estudio, factores y manejo del cultivo de la chufa” 12.000, “seguimiento de la concha brillante” 28.000 y otros como “seguimiento del escarabajo de la palmera” o “diseño de parchís y puzzle de la casita de cartón recortable” de los que no sabemos la cuantía. En total 31 millones de euros en informes externos cuando, desde que está el tripartito en el poder, ha aumentado el número de altos cargos de 149 a 242, el personal de la Generalitat de 126.000 a 180.000 y el personal de “alta confianza” de 227 a 323. ¿No podían haber realizado estos estudios alguno de los numerosos empleados públicos? ¡Ah! ¡Claro! Que si no hay informes externos no se puede premiar a los “amigos”.

El presupuesto para delegaciones, oficinas, misiones y embajadas en el exterior es en 2008 de 2,2 millones de euros. Y es que Carod Rovira cree necesario que Cataluña tenga embajadas en el exterior aparte de las que ya tiene España. ¡Ojo! Los “embajadores” de Cataluña cobrarán la nada despreciable cifra de 88.000 euros anuales.
El fomento del catalán se ha llevado en los seis primeros meses de este año 6 millones de euros, entre subvenciones a colegios franceses, valencianos o casas regionales.
Por cierto, Carod Rovira cobra al año 30.000 euros en dietas por desplazamiento, ya que tiene su residencia oficial en Tarragona. Por lo menos, está empadronado allí. ¿A cuanto cobra el kilómetro?


Debido a la dispersión de sus oficinas, la Generalitat gasta 23 millones anuales en mensajería, paga 100 millones anuales en alquileres y tiene una flota de 95 vehículos y 134 conductores para sus más de 200 altos cargos. Sin embargo, no es suficiente y se ve obligada a usar repetidamente los servicios de una compañía de taxis de lujo.


-Otro que tampoco viaja a pie es el alcalde de Leganés (municipio de menos de 200.000 habitantes). Se ha comprado el mismo coche en el que viaja habitualmente Sarkozy: un Citroën C6 blindado que le cuesta a los habitantes de la ciudad madrileña la mareante cifra de 81.000 euros.

-Los funcionarios de las comunidades autónomas han crecido un 92% en los últimos diez años y los de los ayuntamientos un 19%. Si es así como quieren acabar con el paro… mal vamos.

-Y no me resisto a comentar el despilfarro de la reforma de la sala XX en la sede de la ONU en Ginebra. Nada menos que 20 millones de euros en una reforma, de los que 8 han salido de las arcas españolas como “donación”. De esos 20 millones, 6 han ido a parar a los agradecidos bolsillos del artista, Miquel Barceló. ¿Han visto su “Atapuerca en colores”? Pues tengo que reconocer que no está mal. Pero para 6 millones...


No quiero que me malentiendan; no doy todos estos datos simplemente por criticar. Lo que desearía es que todos estos gobernantes se diesen cuenta de que las necesidades de la población no son esas. Que con lo que pagan por un informe o por una papelera se pueden solucionar los problemas de muchas familias necesitadas y, no digamos ya, con el sueldo de uno de los muchos altos cargos que pululan por las administraciones. Que están ahí para ayudar y no para malgastar.
Pero, mucho me temo, mi deseo se quedará en eso, en un deseo.

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