El tonto del mes (VI): Alternativa Laica

En el caso que nos ocupa este mes, no vamos a referirnos a una sola persona, sino a un grupo, no sabemos si muy reducido, de ellas. En concreto vamos a contarles el caso de la plataforma Alternativa Laica.
Este grupo ha presentado un recurso contencioso-administrativo contra el alcalde de Toledo, Emiliano García Page, del PSOE. El pecado, nunca mejor dicho, que ha cometido este señor ha sido, como alcalde de la ciudad castellana, jurar de nuevo el dogma de fe de la Inmaculada Concepción, según el cual la Virgen fue concebida sin pecado original.

No es que el alcalde socialista se haya vuelto de repente más católico que Benedicto XVI, sino que se trata de una tradición que data de 1616, cuando por acuerdo municipal el alcalde de turno acude desde entonces al monasterio franciscano de San Juan de los Reyes para renovar de forma solemne y ante la autoridad eclesiástica la tradición del juramento de la Inmaculada, tal y como en el siglo XIX fue fijado en una dogma de fe.
Al igual que hizo el año anterior, este año (suponemos que para intentar quitarle hierro al asunto) el juramento no se hizo “bajo mazas”, símbolo de la solemnidad municipal, aunque el regidor portaba en la solapa la medalla y la insignia municipal como máximo representante de Toledo.

Pues bien, a pesar de este “detalle” por parte del alcalde, Alternativa Laica ha vuelto a denunciarle ante el juez, tal y como ya hizo el año anterior. Se basan en el artículo 16 de la Constitución Española, que recoge el principio de aconfesionalidad del Estado y por tanto, argumentan que entre las competencias del alcalde no está la defensa del dogma de fe ni poner bajo la advocación de la Virgen a todos los toledanos.

No se que se creen que les va a pasar si su alcalde los pone bajo la advocación de la Virgen. Igual piensan que a partir de ese momento quedan marcados de por vida y que, por ese motivo, ya no podrán ir por la calle alardeando de ser ateos. No se, igual se creen que se van a “condenar” y entrar por la puerta grande en el cielo. Allí, rodeados de santos y beatos, ¡qué horror!

Ya se que España es un país aconfesional. Y me gusta que así sea. Pero la persecución que están cometiendo algunos grupúsculos contra la religión católica roza el ridículo. Simplemente con hacerle la puñeta a la Iglesia ya están contentos. Pero ya no les basta con quitar los crucifijos de las escuelas o los símbolos religiosos de los organismos públicos (cosa por otra parte bastante lógica), sino que ahora han puesto su punto de mira en las tradiciones populares. No van a tardar en pedir que los encierros de Pamplona se los dediquen a algún “defensor de la causa” en lugar de a San Fermín o que en la Semana Santa de Sevilla no se hagan procesiones religiosas. Al tiempo.
Estoy seguro de que si la tradición no hubiese sido católica sino musulmana, adventista o de la tribu de los pigmeos, esta “plataforma” no hubiese abierto la boca. “Es un acto que refuerza la multiculturalidad” hubiesen alegado, aplaudiendo la actitud del alcalde.
El tiempo y el dinero que dedican a presentar estas denuncias ya los podrían emplear en otras cosas más productivas. Pero, claro, perderían notoriedad... y muchas subvenciones por parte de las administraciones públicas “laicas”.

El alcalde de Toledo, Emiliano García, resta importancia al caso y dice que la tradición es compartida por la mayoría de los ciudadanos. Por supuesto que es así. Estos grupitos, compuestos por unas decenas de individuos (en el mejor de los casos), no representan a nadie, ni siquiera a si mismos. Sin embargo, siempre logran tener eco en los medios de comunicación. Deberían elegir mejor lo que publican.

Ya saben, quien hace tonterías, es que es tonto. Que tomen nota en Alternativa Laica.