Descuelgue de los salarios en España

Yo tampoco sabía lo que quería decir la dichosa palabrita. Pero les aseguro que se va a poner de moda en los próximos meses o, si por desgracia las cosas siguen igual, en los años venideros. “Descuelgue” es la palabra que se emplea para denominar que las empresas obvien los incrementos salariales pactados con sus trabajadores. O sea, que si en su empresa existía un convenio firmado que les aseguraba un aumento salarial de un 2,5 ó un 3%, si demuestran que tienen dificultades económicas, olvídense de él. Eso si, se podrán acoger a esta medida las empresas que garanticen todos los puestos de trabajo.
Esto no lo sugiere la patronal, sino que es el mismísimo Ministerio de Trabajo, de Celestino Corbacho, el que recomienda que se tenga en cuenta en el acuerdo interconfederal de negociación colectiva para 2009.

No se ustedes, pero yo no conozco ninguna empresa que no tenga dificultades económicas, así que los trabajadores, este año y los siguientes, nos veremos en la tesitura de tener que aceptar lo malo, 0% de aumento, o lo peor, a la cola del paro. Así de crudo.

Los convenios colectivos, ya sea por sectores o por empresas, se suelen firmar para varios años. Cuando el IPC supera el estimado a principios de año por el gobierno, se suele aplicar una cláusula de revisión salarial que mantiene el poder adquisitivo de los trabajadores. Ahora, como parece que el IPC va a subir bastante menos que lo previsto, podría llegar a entenderse que esos convenios se revisasen y la subida fuese algo menor a la pactada. Pero a lo que no le veo ningún sentido es que, debido a los problemas económicos de una empresa, sus trabajadores se queden sin subida salarial. ¿Acaso cuando esa misma empresa gana mucho más de lo que esperaba sus trabajadores tienen el doble del aumento pactado?

La situación general está mal y, parece ser, que se pondrá peor. Y está claro que al final, como casi siempre, seremos los trabajadores los que más lo sufriremos.
Aunque no nos guste, esta crisis provocará que las condiciones de los trabajadores cambien para siempre. Me cuesta reconocerlo, pero me parece que la patronal lleva razón en algunas de las cosas que dice. Todos nos ponemos las manos a la cabeza cuando oímos la famosa frase de “abaratar el despido” o la de “flexibilizar el mercado laboral” pero los datos les dan la razón. España tiene una economía similar a la de sus socios comunitarios. Sin embargo, cuando las cosas vienen mal dadas, esas economías europeas apenas destruyen empleo mientras la nuestra se desmorona. Cuando ellos se asustan al llegar a una tasa de paro del 8%, en España ya sobrepasamos el 15%.
Ya se que nuestra economía se ha basado en la construcción y los servicios para crear empleo y, al hundirse estos dos sectores, la sangría de puestos de trabajo ha sido mayor. Pero la industria tampoco se está salvando y su tasa de paro aumenta con cifras de dos dígitos. Y esto, comparándolo con lo que pasa en Europa, ya no tiene explicación.

Maldita la gracia que me hace que después de varios lustros trabajando para la misma empresa me puedan echar con una indemnización ridícula, pero los datos están ahí y no podemos negar la evidencia. Si queremos ser competitivos y que en la próxima crisis que llegue (que llegará) no suframos esta debacle laboral, tendremos que imitar a nuestros socios comunitarios o, si me apuran, a la primera economía mundial, Estados Unidos (son los que más tiempo llevan sufriendo la crisis y su tasa de paro es del 7,5%).

La crisis pasará (esperemos que pronto) y nos tiene que servir para aprender de los errores y salir, en la medida de lo posible, fortalecidos.
Que, al menos, este desastre nos sirva para algo.