UN KILOMETRO AL DIA

Algunos gobiernos, universidades y las propias casas fabricantes de automóviles investigan con nuevos carburantes para que el efecto del transporte no sea tan pernicioso para el medio ambiente, pero vistos los adelantos y las fechas en las que tienen previsto aplicar al gran consumo los adelantos que ya tienen, o se ponen las pilas (nunca mejor dicho) o el futuro está más que negro.

Según un estudio del Centro Internacional del Clima y del Medio Ambiente de Oslo las emisiones del transporte suponen el 16% del total de las emisiones de CO2 a la atmósfera. Y lo que es peor, en la última década ha aumentado a un ritmo de un 25% que es el doble de lo que han aumentado las emisiones totales.
Los sectores industriales están consiguiendo moderar las emisiones; tienen sus planes para reducirlas y lo están consiguiendo (por ejemplo, en la UE las emisiones se redujeron en los últimos diez años). En cambio el sector del transporte es muy difuso; existen cientos de millones de usuarios y por lo tanto es dificilísimo de controlar. Y mientras en los países europeos las emisiones aumentaron en un 21% (que es una barbaridad) en algunos países asiáticos llegaron hasta un 50%.
Estas cantidades no van a disminuir, no nos equivoquemos, sino a aumentar, sobre todo en los países emergentes (más dinero, mas coches, es inevitable) y creen los noruegos autores del estudio que para el 2050 el aumento sea de un 50% adicional a lo que ya tenemos. Para echarse a temblar.
Y las “buenas” noticias no acaban ahí. Los tubos de escape también emiten multitud de sustancias dañinas con el medio ambiente como el óxido nitroso, el anhídrido carbónico, la carbonilla y distintos compuestos de sulfuro.

Algunos ciudadanos de a pié han reaccionado a su manera y sin hacer casi ruido han creado la iniciativa “un kilómetro al día”. Proponen que todos los conductores cambien diariamente un kilómetro (al menos) de conducción de cualquier vehículo por un kilómetro de agradable desplazamiento a pié.
Está claro que si nos vamos a trabajar con el coche lo que no vamos a hacer al volver a casa es dejárnoslo a un kilómetro de casa para cumplir con la iniciativa pero, lo que si se puede hacer es una o dos veces a la semana ir a pié a algún sitio(al que normalmente vamos en coche o moto) que no esté excesivamente lejos. Completando siete kilómetros semanales habremos cumplido con la iniciativa.
Parece poco, pero hagamos números. Diariamente se mueven en España alrededor de quince millones de vehículos. Con esta iniciativa se ahorrarían quince millones de kilómetros o, hablando en carburante, un millón y medio de litros diarios.
“Con esto poco solucionaremos” me dirán ustedes. Les tengo que dar la razón, pero la sensación de haber contribuido con una “miaja” al esfuerzo por evitar el cambio climático no se la quita nadie. Y las calorías que queme al caminar, tampoco.