GRANDES COMETAS PARA BARCOS

Volvemos a tener noticias del mundo de la marina mercante, aunque en esta ocasión mucho mejores que en caso del Prestige.
La compañía de navegación Beluga con ayuda del gobierno alemán ha empleado diez años en investigaciones para desarrollar un sistema que permita ahorrar combustible a los cargueros en sus largas travesías. El invento parece de ciencia ficción pero, si las primeras pruebas dan los resultados que se esperan, podrían transformar un sector que ha estado ajeno durante muchos años a las innovaciones de otros sectores en ecología y ahorro de combustible.
El invento no es otro que una gigantesca cometa que se acoplará al barco en cuestión y, con ayuda del viento, puede reducir hasta en un 50% el consumo energético y, consiguientemente la contaminación que provoca.

El primer viaje partirá de la ciudad alemana de Bremen y se dirigirá con sus 10.000 toneladas de peso hasta Venezuela para después volver a su punto de origen. Cuando el barco se encuentre alejado de la costa desplegará una cometa de 160 metros cuadrados con el que espera ahorrar entre un 10 y un 15% de combustible. Esta cometa se mueve por una pista de metal alrededor del barco. De esta forma puede aprovechar todas las direcciones que tome el viento y evita peligrosas inclinaciones del barco.
Si estas primeras pruebas tienen éxito ya se piensa en cometas mucho más grandes, de hasta 5.000 metros cuadrados, que puedan ayudar a los inmensos buques portacontenedores a ahorrar hasta un 50% de combustible.

El mundo de la marina mercante no ha logrado aprovechar la energía renovable hasta ahora. Quizá sea por que el carburante siempre ha sido económico o por las dificultades de colocar velas en las cubiertas de los barcos, ya que estas quitan mucho espacio.
El transporte marítimo aumenta de forma exponencial ya que la industria manufacturera, cada vez más, se encuentra a miles de kilómetros de distancia de los grandes centros de consumo debido a la globalización y a la deslocalización. Cerca de 100.000 cargueros transportan el 95% de las mercancías que genera el comercio mundial. Utilizan 2.000 millones de barriles de combustible altamente contaminante y generan 800 millones de toneladas de CO2, es decir, el 4% de las emisiones totales anuales que provoca el hombre. Pero no es sólo el CO2 lo que preocupa, la navegación expulsa a la atmósfera mas dióxido de azufre que todos los coches y camiones del mundo juntos.

Todavía quedan muchas pruebas por hacer, pero esperemos que en un futuro próximo podamos ver enormes barcos, con sus cometas desplegadas, surcar los océanos.