PROFESIÓN DE RIESGO

Según el último informe de Reporteros Sin Fronteras, durante el año 2007 fueron 86 los periodistas asesinados en todo el mundo y 135 estaban encarcelados a 31 de Diciembre por sus actividades profesionales.
La cifra es prácticamente idéntica a la de 2006 pero es más del triple de los que murieron en 2002.
El pésimo ranking lo encabeza un año más Irak con 47 muertos, seguido de Somalia con 8 y Pakistán con 6. Pero no sólo hay muertes en países con conflictos bélicos. También en Sudamérica ha habido varios asesinatos en México, Brasil, Paraguay y Perú.

La cifra de periodistas detenidos durante todo el año pasado fue de 887. En este caso, el ranking lo encabeza Pakistán con 195, seguido de Cuba con 55 e Irán con 54. Como pueden comprobar, todos estos países son “democracias consolidadas” y, en muchos de los casos, íntimos colaboradores de nuestro gobierno en el proyecto de la “alianza de las civilizaciones”. ¿Por qué no se empieza la alianza exigiendo a esos gobiernos que cesen semejantes tropelías?

En el mundo de Internet las cosas no han ido mucho mejor: 65 “ciberdisidentes” han sido detenidos por expresarse libremente a través de Internet de forma crítica con sus gobiernos. Aquí se lleva la palma otra “democracia” como es China con más de medio centenar seguida de Vietnam. 2.600 sitios web o blogs han sido cerrados durante el pasado año sobre todo en China. También son destacables los recientes sucesos de Birmania.

Mención aparte merece el último caso conocido. En este caso ha sucedido en Arabia Saudí: el famoso bloguero en su país Fuad al-Farhan fue arrestado hace tres semanas por divulgar desde su blog opiniones sobre detenidos acusados de apoyar el terrorismo y sobre la necesidad de reformas en este rico reino árabe. Fue demasiada la “osadía” de este bloguero recordando al mundo entero la dictadura que sufre el reino Saudí (recordemos que carecen de parlamento y de partidos políticos). Por cierto, sus mandatarios también son “muy amigos” de los nuestros, en especial de nuestro Rey.

Dejando aparte las muy lamentables muertes de periodistas en zonas en conflicto, resulta inconcebible que existan muertes o detenciones en otros muchos países sólo porque “molestan” a los gobiernos de turno. E igual de lamentable resulta que el 90% de los asesinatos queden impunes. La libertad de expresión es uno de los derechos fundamentales más valiosos que poseemos. Se tiene que salvaguardar a toda costa.


-Lástima que habiendo tantos periodistas comprometidos también haya tantos otros que convivan con el poder para así favorecerse.

- Tiene usted razón, Don Graciano, mucha razón.