La ignorancia energética de los españoles

Nunca he tenido ninguna duda de que a los políticos que nos gobiernan les interesa que sus “súbditos” seamos lo más ignorantes posible. Es lógico, cuanto menos sepamos, cuanto más engañados nos tengan, más fácil será influenciarnos para que apoyemos una u otra postura ante cualquier problema o conflicto que pueda surgir. Si encima, como es el caso español, los gobernantes controlan, directa o indirectamente, la mayoría de los medios de comunicación, la tarea se simplifica. Nos manejan como a corderitos para que nuestra opinión sea la que a ellos más les interesa en cada momento.
Resulta lamentable que quien se debería desvivir para que su población fuese culta y estuviese bien informada, haga todo lo posible para que eso no sea así. Ejemplos los vemos todos los días, pero ya ni nos damos cuenta. Parece como si tuviésemos el cerebro acostumbrado al lavado que nos pegan diariamente.

Viene todo esto a colación de un informe que ha emitido recientemente el Instituto Español de la Energía. En él, se demuestra la ignorancia que tenemos los españoles en los temas relacionados con la energía. La que nuestros políticos han querido que tengamos. Les dejo unas pequeñas “perlas”.
Los españoles son los europeos más reticentes a la energía nuclear. Décadas de propaganda de nuestros gobernantes han dado sus frutos. Los españoles la consideran la principal responsable de ¡la contaminación atmosférica! Desconocen que es precisamente una de las energías que menos contaminan.
Por otra parte, consideran a la energía nuclear como muy peligrosa. Supongo que si les informasen de los accidentes en las minas para sacar carbón para las centrales térmicas o de los desastres de las plataformas petrolíferas y de los superpetroleros para llevar combustible a esas mismas centrales, también las considerarían como muy peligrosas. ¿No se han dado cuenta de que cada vez que se habla de energía nuclear se acaba mencionando Chernobil? Si cada vez que hablásemos del transporte aéreo mencionásemos el accidente de Los Rodeos o el del Concorde, ya habríamos acabado con las compañías aéreas.

Otra de las creencias más comunes es que la energía eléctrica se produce sólo gracias al petróleo y a las instalaciones hidráulicas. El carbón, la energía más contaminante que existe, nunca se tiene en cuenta. Se cree que es cosa del pasado.
Las energías solar y eólica son consideradas como las más baratas. O sea, al revés de la realidad ya que debido a su escaso grado de desarrollo y a las subvenciones públicas que reciben, realmente son las más caras. Y con diferencia. Si supiésemos que este tipo de energías las pagamos dos veces, una en el recibo de la luz y otra mediante subvenciones que salen de los presupuestos del estado, seguramente ya no nos gustarían tanto las energías renovables. Pero claro, esto no les interesa que lo sepamos. Tabú.

Según los redactores del informe, los españoles tenemos una gran necesidad de información perseverante, clara y veraz sobre la energía porque desde las voces públicas, políticos y medios de comunicación, nos llega una información insuficiente.
Les ha faltado decir que nos manejan como si fuésemos marionetas, a su antojo.
En una cosa no nos equivocamos los españoles; el 82 % de los encuestados consideran que los partidos políticos incluyen la defensa del medio ambiente en los programas electorales para obtener más votos. En el fondo, no somos tan ignorantes.